Una vez recolectada, la cereza debería mantenerse entre 6 y 8 º C. Hablamos de cortos períodos entre su relcolección en finca y su consumo en casa del consumidor. Para periodos mas largos de almacenamiento, la temperatura debe bajarse hasta 0 º C.
Consejos:
Para mantener la cereza en las mejores condiciones en casa del consumidor, no hay nada como guardarlas dentro de una bolsa de plástico bien cerrada en un frigorífico casero. Pero si por lo que sea, la fruta se calienta, el plástico se convierte en un arma de doble filo, porque las cerezas, calientes y dentro de una bolsa plástica, literalmente se cuecen y quedan inservibles al poco tiempo.
No existe consenso sobre la temperatura de consumo de una cereza. Hay quienes opinan que el refrigerar la fruta, le resta sabor. Otros que si no es así, se elimina el poder refrescante de la misma. El hecho es que cada uno elija la temperatura que más le agrade, evitando los extremos, como por debajo de 6 ºC o por encima de 20 ºC.